DIEGO LÓPEZ: “METER UN GOL EN MESTALLA ES ALGO MÁGICO”
El atacante asturiano atiende a VCF Media tras el partido frente al Real Betis
Pasan los años, pero hay momentos únicos que se recuerdan toda la vida. El 29 de abril de 2007, el Juvenil del Valencia CF entrenado por Óscar Fernández se proclamó campeón de la Copa de Campeones por primera y única vez en la historia del club tras vencer en la final al Real Madrid (3-1) en el estadio El Maulí de Antequera. En esa final había dos futbolistas de la actual primera plantilla: Jaume Costa y Dani Parejo.
“Son recuerdos muy bonitos, teníamos un grupo muy bueno y con el que todavía tengo amistad. Había muy buen rollo entre todos y eso fue fundamental para ganar. Fue un año histórico para el Juvenil”, recuerda Jaume a VCF MEDIA en referencia a una temporada en la que estuvieron muy cerca de conseguir el triplete. Ganaron LaLiga, la Copa de Campeones y llegaron a la final de Copa, pero no pudieron con el Albacete.
Una de las curiosidades se vivía en el vestuario antes de los partidos. Hubo un momento de la temporada en el que el grupo comenzó a cantar una canción que acabó convirtiéndose en rutina, “una canción que nos ayudó a estar más concentrados, a ser más competitivos y, sobre todo, a tener más confianza en nosotros mismos”. Con el paso de los años, Jaume es consciente que hay cosas externas que pueden favorecer al deportista de élite a competir y esa fue una de ellas. La canción, cantada al unísono, decía lo siguiente: “Este equipo tiene toque, este equipo tiene gol, este equipo tiene todo… para salir campeón”. Y salían muy súper motivados y concentrados al césped.
Tras vencer al Antiguoko (3-0) en cuartos de final y al RCD Espanyol (2-0) en las semifinales, solo faltaba vencer al Real Madrid que contaba en sus filas con un jugador que sobresalía sobre el resto: Dani Parejo. Óscar Fernández les advirtió en la previa del partido y el actual capitán lo demostró en el campo, es más, en el minuto 70 envió un balón al poste con 2-1 en el marcador, antes de que Pierrick anotara el 3-1 definitivo en el tiempo de descuento. “De Dani recuerdo la melena larga que llevaba, como Tarzán. Somos buenos amigos y, como él sabe, está mejor con el pelo que lleva ahora (risas). Era su mejor jugador y muy a tener en cuenta. Ellos jugaron muy bien aquel partido y nosotros fuimos más efectivos”.
Jaume tenía 19 años y entrenaba diariamente con el filial dirigido por Sánchez Duque. Disfrutaba jugando al fútbol e iba cubriendo etapas madurando con los “veteranos” del VCF Mestalla, muy exigentes con todos los que subían del juvenil para estar a su altura. Había días que se llegaba a pasar mal, pero era bueno, como también cuando le llamaban a entrenar con el primer equipo, un elemento de motivación más en el sueño de convertirse en futbolista de élite. Jaume siempre ha tenido la mentalidad de disfrutar del “día a día, porque si lo haces bien siempre tendrás más posibilidades de progresar y de mejorar”. Y ha cumplido el objetivo.
Torneos como la Copa de Campeones o la Copa del Rey, en palabras de Jaume, “te enseñan a competir”. En aquella época, los clubes con más repercusión dominan las ligas, pero cuando te enfrentas a los campeones de otras zonas ya son de tu mismo nivel e incluso superiores, una situación que te ayuda a “adquirir experiencia, a sentir la presión y los nervios de verdad. Son torneos fundamentales”.
Jaume, como el resto de los integrantes de la primera plantilla, tiene “ganas de volver a la rutina”. En casa sigue las pautas de entrenamiento y disfruta con su familia, pero como reconoce a VCF MEDIA, “se echa de menos competir, la rutina de la competición, estar junto al equipo, con esas risas y la complicidad que hay en el vestuario. Tenemos muchas ganas de volver”.
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